Colombia es una nación moderna, con una infraestructura que aprovecha sus recursos naturales y capital humano para enamorar al turista. Por su privilegiada ubicación en el continente y la presencia de sus tres cordilleras hijas de los Andes, reúne en sus regiones naturales todos los ambientes del trópico: glaciares, playas, llanuras, montañas, selvas y desiertos.
Entre tantos destinos que ofrece Colombia, resulta dificil decidirse, conocerlos es una aventura inolvidable que, sin duda, se quedará impresa en la memoria...
Antioquia:
Es un territorio de gente trabajadora, siempre optimista y persistente. Desde sus inicios, este departamento se ha caracterizado por tener a las personas más amables y emprendedoras del país.
Este humor campesino, se mezcla con la vida agitada de la metrópoli, en su capital. No hay montañas ni rios que puedan amilanar los deseos de crecer de estas personas, razón por la cual tienen uno de los territorios más prolíficos del país.
En medio de él, se anida la ciudad de Medellín, la segunda en tamaño y atractiva no sólo por su actividad comercial e industrial, sino también por su agitada vida cultural y nocturna.
Nariño:
Llegar a Nariño es iniciar una aventura a través del tiempo en un territorio que sorprende por cualquier ruta cardinal que se emprenda.
Descubrir los pueblos pastoriles que aún urden bellos paños en telares con hilos de lana virgen, en medio de montañas cubiertas con "colchas de retazos" que forman la policromía de los cultivos de minifundio de la cordillera de los Andes, en contraste con las chalupas que se deslizan por los laberintos del manglar del Pacifico sur Colombiano. San Juan de Pasto, su capital se asienta en el Valle de Atriz en estribaciones del Volcánn Galeras, se caracteriza por la amabilidad de su gente y la habilidad en las artes.
Entre tantos destinos que ofrece Colombia, resulta dificil decidirse, conocerlos es una aventura inolvidable que, sin duda, se quedará impresa en la memoria...
Antioquia:
Es un territorio de gente trabajadora, siempre optimista y persistente. Desde sus inicios, este departamento se ha caracterizado por tener a las personas más amables y emprendedoras del país.
Este humor campesino, se mezcla con la vida agitada de la metrópoli, en su capital. No hay montañas ni rios que puedan amilanar los deseos de crecer de estas personas, razón por la cual tienen uno de los territorios más prolíficos del país.
En medio de él, se anida la ciudad de Medellín, la segunda en tamaño y atractiva no sólo por su actividad comercial e industrial, sino también por su agitada vida cultural y nocturna.
Nariño:
Llegar a Nariño es iniciar una aventura a través del tiempo en un territorio que sorprende por cualquier ruta cardinal que se emprenda.
Descubrir los pueblos pastoriles que aún urden bellos paños en telares con hilos de lana virgen, en medio de montañas cubiertas con "colchas de retazos" que forman la policromía de los cultivos de minifundio de la cordillera de los Andes, en contraste con las chalupas que se deslizan por los laberintos del manglar del Pacifico sur Colombiano. San Juan de Pasto, su capital se asienta en el Valle de Atriz en estribaciones del Volcánn Galeras, se caracteriza por la amabilidad de su gente y la habilidad en las artes.